ESCLAVA mía, témeme. Ámame. Esclava mía!
Soy contigo el ocaso más vasto de mi cielo,
y en él despunta mi alma como una estrella fría.
Cuando de ti se alejan vuelven a mí mis pasos.
Mi propio latigazo cae sobre mi vida.
Eres lo que está dentro de mí y está lejano.
Huyendo como un coro de nieblas perseguidas.
Junto a mí, pero dónde? Lejos, lo que está lejos.
Y lo que estando lejos bajo mis pies camina.
El eco de la voz más allá del silencio.
Y lo que en mi alma crece como el musgo en las ruinas
HOLA SI ESTA PADRE TU BLOG MUY PADRE PERO FALATA MAS NO? Y LAS UVAS NO TIENE NADA QUE VER JEJEJ ES UNA CRITICA CONSTRUTIVA LE FALTAN POEMAS
ResponderEliminarashhh e gxias por el comentario pero no se te antojaron las uvas???
ResponderEliminarO0la esta padre tu blog eh jejejejej!!!!!!!!!!!!!!!!!!1
ResponderEliminarel auto0r que esco0giste esta muy bn eh y los poemas estan muy padres jejejej sale paza al mioo0.
O0la de nuev0o0 aki molestando0 o0tra vez jajajajja!!!!!!!!!!!!!!!!!
ResponderEliminarcreo0 que le faltan otros poemas y azi ahhaha
pero0 tu = der cumplida co0mo0 siempre eh vas haber que vas a sacer buenas calificaciones eh!!!!!!!!!!!!!!!!
ojalá jejeje tu sabes una que esta media distraida
ResponderEliminarno cumple mui bien pero aii la llevamos........
ola chamaca pues aqui paso a ver ese poeta que me gusto neta asu que padre eee espero que estes de lo mejor cuidate vale saludos
ResponderEliminarÉste poema es de Pablo Neruda, no de Rubén Darío.
ResponderEliminarÉste poema es de Pablo Neruda, no de Rubén Darío.
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